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ARTRITIS GOTOSA TOFÁCEA. A PROPÓSITO DE UNA
IMAGEN DEL PASADO.

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Centro

Sección de Reumatología. Complejo Hospitalario de Jaén.

Tema

Publicacion

Objetivos

INTRODUCCIÓN: Se conoce con el nombre de gota tofácea, a la artropatía
por cristales de urato monosódico que presenta tofos. Estos se perciben
como imágenes nodulares de diferente tamaño que suelen localizarse en las
proximidades de las articulaciones, y corresponden a la acumulación de
dichos cristales en los tejidos blandos.

Pacientes y Metodo

CASO CLÍNICO: Varón de 59 años, sin antecedentes patológicos de interés.
Desde hace quince años refiere brotes de poliartritis de inicio súbito con
tendencia a la simetría en IFP, IFD, rodillas y primera articulación
metatarsofalángica de ambos pies. Actualmente refiere poliartralgias
intensas de características inflamatorias en muñecas, IFP e IFD, que se
acompañan de gran impotencia funcional. El enfermo ha venido tomando de
forma esporádica AINES, en ningún caso hipouricemiantes y nunca había
consultado al médico por este motivo.
A la exploración física destaca la presencia de tofos de gran dimensión en
IFPs, IFDs, MCFs y codos. Así como signos inflamatorios en dichas
articulaciones. Exploaraciones complementarias: Hematimetría normal.
Bioquímica básica: ácido úrico: 9,2 mg/dl, resto normalnormal. FR:
negativo. VSG: 20mm 1ªh. PCR: negativo. Uricosuria de 24h: 220 mg/L.
Rx de manos: extensas erosiones óseas asimétricas en manos, afectando
principalmente a la IFD del 4º dedo mano derecha. Rx de pies: múltiples
erosiones y aumento de partes blandas. Rx de codos: Aumento de partes
blandas y erosiones óseas subyacentes en olécranon derecho.
Evolución: El enfermo fue diagnósticado de gota tofácea crónica. Se
comenzó con tratamiento con alopurinol, presentando en controles sucesivos
descenso de los valores de ácido úrico y disminución paulatina del tamaño
de los tofos.

Resultados

DISCUSIÓN: Se trata de un paciente que presenta múltiples tofos de gran
tamaño y erosiones muy llamativas en articulaciones de manos y pies.
Actualmente, debido al diagnóstico precoz y al tratamiento con
hipouricemiantes, es muy raro encontrar un paciente como el que
presentamos, ya que los tofos suelen ser una manifestación tardía de la
enfermedad que aparece en los enfermos no tratados.

Conclusiones